Ciudad de Panamá, 1 de abril de 2025. La abogada ambiental Martita Cornejo, la misma que demandó la inconstitucionalidad del Contrato-Ley Minero 406, presentó ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) una demanda que impugna la aprobación del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) al Proyecto Puerto Barú en los Manglares de David.
Cornejo, como parte de la sociedad civil, presentó la demanda contencioso-administrativa de nulidad ante la Sala Tercera de la CSJ, pidiendo que se declare nula por ilegal, la Resolución 003-2024, de 16 de enero de 2024, emitida por MiAmbiente y por la cual se aprueba el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Puerto Barú.
La referida aprobación del EIA por parte de MiAmbiente se dio a pesar de que dicho proyecto se pretende desarrollar en el área protegida de los Manglares de David, el cual adquirió esta condición por Acuerdo Municipal No. 21 de 2007, emitido por el Consejo Municipal del distrito de David, que declaró que los Manglares de David son zona protegida.
La Sección de Áreas Protegidas y Biodiversidad de Chiriquí dentro del expediente del EIA señaló: “La ejecución del proyecto dentro del área protegida puede provocar la afectación de los servicios ecosistémicos que brindan los manglares de David”.
“… Se puede concluir que son zonas utilizadas por especies de fauna como sitio de reproducción, alimentación y tránsito”, entre otras importantes consideraciones.
En tanto, la Dirección de Costas y Mares de MiAmbiente manifestó que los cetáceos presentes en la zona, especialmente la ballena jorobada, utiliza esta área marina para funciones de reproducción; individuos de dos poblaciones a lo largo del año utilizan el Golfo de Chiriquí, por lo que la zona es considerada a nivel nacional como IMMA’s área marina de protección de mamíferos marinos, a partir de 2022”.
Igualmente, detalla dicho informe que “el desarrollo (operación y mantenimiento) de la obra pone en riesgo a largo plazo los servicios ecosistémicos que brindan los manglares del área protegida, dado que las labores de dragados causarán afectación por erosión a esta zona que representa un hábitat de importancia ecológica para cría de muchas especies marino-costeras que puedan ser impactadas por las embarcaciones de alto calado, eventos de derrames, etc.”.
“Es por todo lo anterior que también pedimos a la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia que, ante el inicio de las obras del Proyecto Puerto Barú, adopte la medida cautelar de suspensión de la Resolución que aprobó el Estudio de Impacto Ambiental de dicho proyecto, la cual atacamos de ilegal, pues estas obras pueden causar un daño irreversible a la naturaleza y a las áreas protegidas de los Manglares de David”, enfatizó la abogada Martita Cornejo.




