Hoy es un día histórico. Porque más que un cierre de campaña, es el comienzo de una nueva etapa en la vida de los panameños. Después de 10 años de gobiernos que han fallado, hoy tenemos una oportunidad de seguir igual o cambiar y mirar hacia el futuro con esperanza.
Ustedes tendrán la libertad de escoger entre más promesas incumplidas, incertidumbre y venganzas politiqueras o volver por el camino del cambio y la prosperidad que les llevamos con el gobierno de Ricardo Martinelli.
Todos fueron beneficiados, desde los pelaos, hasta nuestros viejitos que necesitaban una ayuda solidaria.
Atacamos como nunca antes el desempleo y la pobreza, llevándolos a niveles históricamente bajos.
Es por eso que la gente se me acerca y me dice: Mulino, estamos con ustedes, mándele un abrazo al loco. Dígale que está en nuestros corazones. No crean que nos quieren por nuestra linda cara. Nos quieren porque trabajamos duro para darles una vida mejor.
Desde joven me daba tristeza ver que, en un país tan bonito y con tanta riqueza, hubiese tanta gente pobre. A medida que fui creciendo en mi provincia, fue creciendo ese sentimiento de solidaridad, que me llevó a servir a mi país.
Primero, hace más de 3 décadas. Aquí mismo, en la Vía España, al lado de la emblemática Iglesia del Carmen, cuando un grupo de jóvenes luchábamos contra la dictadura militar de Noriega, en la Cruzada Civilista y liderada por Guillermo Endara, Ricardo Arias Calderón y Billy Ford; luchábamos en las calles para devolverle la democracia a este pueblo panameño, digno y noble, respetando la voluntad popular.
Después, como vice ministro y ministro de Relaciones Exteriores reconstruyendo la democracia y la imagen de Panamá ante el mundo y, por último, como ministro de Gobierno y de Seguridad en el mejor gobierno de la historia. ¡El gobierno del cambio!
Por primera vez se veía la diferencia y se sentía el cambio, no solo en el bolsillo, sino en la cara de la gente. Alcanzamos el pleno empleo. Eso quiere decir, que cada uno de ustedes que buscaba un trabajo, lo encontraba. Le dimos a los maestros el mayor aumento de salario de la historia. Hicimos un gobierno que ayudó a los panameños a realizar sus sueños.
Como Ministro de Seguridad, encabecé el equipo que recuperó el Darién que estaba en las manos de la narcoguerrilla y empezamos días más seguros para la familia panameña. Hoy les manifiesto que haré el esfuerzo para terminar con esa crisis migratoria en nuestro territorio, con respeto a los derechos humanos, y con sincera participación internacional.
Desde entonces, a Ricardo y a mi nos han hecho de todo. Nos persiguieron y encarcelaron. A él lo inhabilitaron y conmigo lo intentaron con todo tipo de presiones. Pero nada se compara con lo que ustedes han padecido. Perdieron sus empleos y gran parte de sus ingresos. La comida, la luz y las medicinas están cada vez más caras y ustedes, cada día sienten que son más pobres.
Vamos a ganar y juntos, vamos a cumplirle a nuestro pueblo, otra vez.
Ustedes ser preguntarán, para quiénes son estas sillas vacías.
Por lo general estas sillas se reservan para los aliados políticos y allegados. Pero hoy estos puestos están reservados para mis invitados especiales:
Para nuestros campesinos que con sus manos hacen producir la tierra.
Nuestros jóvenes que pronto tendrán la ciudad universitaria con dormitorios cómodos y bien baratos para los que vienen del interior.
Para los que, con su trabajo, ayudan a empujar nuestra economía.
En nuestro gobierno los estudiantes volverán a tener las oportunidades y herramientas para que desarrollen su talento.
Esta vez vamos a darle un lugar muy especial a nuestros deportistas. Terminaremos coliseos y apoyaremos entrenamientos y capacitación. ¡Deseamos que se luzcan!
Y nuestros pueblos originarios tendrán mejor salud y educación.
Los desocupados volverán a tener los empleos que merecen, bien remunerados.
El sector médico, quienes día a día luchan para darle una mejor salud a nuestro pueblo.
Daremos igualdad de oportunidades a nuestros discapacitados. Para ellos también aplicará el programa de primer empleo.
Tenemos un puesto especial para nuestros educadores. Los invitaré a conversar para alcanzar acuerdos que beneficien a nuestros estudiantes y garanticen mejores condiciones para ustedes.
Los servidores públicos, que verdaderamente trabajan duro, conmigo pueden estar tranquilos. Voy a gobernar con los mejores, vengan de donde vengan. Pero las botellas conmigo no llevan ningún chance. Simplemente ¡NO VAN!
Los adultos mayores tendrán más y mejor atención.
El arte y el folclor serán valorados en nuestro gobierno.
Esa silla vacía está reservada para Ricardo Martinelli.
Ricardo no puede estar compartiendo con nosotros por la injusta persecución política contra él,
Roberto, Alanis, Teresa, Eduardo, Hernandelia, Ramón, Ana, Dídimo, Joel, Hillary, Andrés, Daniela, Félix, Siler, Sebastián, César, Josué y Ashley, son parte de los 4 millones de panameños olvidados por los últimos dos gobiernos. Nosotros volveremos a darles la importancia que corresponde, poniendo sus intereses primero.
Nos estamos enfrentando a un poderoso sistema que no quiere que las cosas cambien. Lo que queda claro es que no importa lo que nos hagan, la memoria y el legado del gobierno que le dio los mejores días a este país, no lo podrán borrar. Escuchen bien: ellos no son más poderosos que la voluntad de todos ustedes. Iremos unidos a las urnas a votar EN PLANCHA POR JOSÉ RAÚL MULINO Y VERÁN COMO EL 5 DE MAYO VAMOS A ARRASAR.
Les prometo que, con el triunfo, esos ataques desaparecerán, pues la Constitución es clara cuando dice que EL PODER PÚBLICO SÓLO EMANA DEL PUEBLO. Y VAMOS A HACER CUMPLIR LA CONSTITUCIÓN.
No estamos solos, nos acompaña todo un pueblo cansado de más de lo mismo y que quiere un cambio. También está con nosotros Pepe Muñoz del partido Alianza. Nos acompaña Chello Gálvez que, como alcalde hará los Chello Markets y las farmacias populares de Chello, para darles comida y medicina barata los capitalinos.
Reiteramos nuestro compromiso de cercanía y apoyo al sector agropecuario nacional. Tendrán en mi gobierno un aliado, para hacer que su producción les rinda y logremos ampliar mercados nacional e internacional.
Ustedes son unos héroes que se han aguantado 10 años de falsas promesas y de falsos Mesías. Pero nadie aguanta 5 años más de lo mismo.
El 5 de mayo se acaba la incertidumbre y empieza una nueva era de esperanza. Volveremos a cambiar a Panamá con obras como el tren Panamá – David para mis paisanos del interior del país.
Más cambios vienen, llevando el metro cada vez más lejos. Por ejemplo, la línea 2 llegará hasta Paso Blanco en Pacora con ramal a La Siesta.
A los jóvenes, quiero pedirles, no solo su voto de confianza, sino que me acompañen a construir un país más justo para todos, llevando progreso y cuidando nuestra biodiversidad. En mi gobierno sumaré jóvenes para que pronto manejen los destinos del país. Juntos haremos un gran cambio en la educación con las Laptops, útiles y uniformes, y la construcción de la ciudad universitaria con dormitorios para los estudiantes del interior.
Vamos a cambiar la salud terminando el hospital del niño, equipando la ciudad de la salud, terminando los MINSA CAPSI, el hospital de Bugaba, que detuvieron estos gobiernos y la construcción del nuevo hospital oncológico, con salas de tratamiento en el interior del país.
Cambiaremos la calidad de nuestras carreteras con el plan nacional de Reconstrucción Vial que generará miles y miles de empleos. Igualmente, la rehabilitación de caminos de penetración, olvidados y dañados por el transcurso del tiempo y la falta de mantenimiento.
Y hablando de empleos, haremos el mayor programa de primer empleo de la historia, para que nuestros jóvenes ganen chen chen y experiencia.
Terminaremos el cuarto puente sobre el canal de forma rápida, dejando atrás el paso de tortuga que impusieron los últimos gobiernos.
Con el agua pasa lo mismo que con el chen chen: hay mucho, pero le llega a poca gente. Por eso haremos un gran cambio construyendo la potabilizadora de Bayano para llevar agua al este de la capital. Y más potabilizadoras en el interior para resolver de una vez por todas, el problema del agua. La del Río Santamaría para Azuero será impostergable. Mientras esto sucede, implementaremos una cadena de pozos para que toda la población carente de agua logre, rápidamente acceso a la misma.
Panamá volverá a ser el país más seguro de América Latina y ese cambio lo haremos dándole, nuevamente, a la Fuerza Pública las herramientas y el equipo, que necesitan para combatir el delito. Pero también le subiremos la moral. ¡El país debe sentirse orgulloso de la Fuerza Pública!
Pero nuestro cambio más importante se llama CHEN CHEN. Alrededor de esta panameña expresión se ha tejido toda una cultura de esperanza y de cambio. Prepárense porque con tantas obras y tantos programas en favor del pueblo, se generará una gran ola de empleos y buco chen chen pa ti.
Quiero agradecerles a todos los que me recibieron en su hogar, previo a mis caminatas. A los que trabajaron duro para que esté yo aquí. A nuestro equipo leal y trabajador que puso el corazón en esta campaña, a todos ustedes muchas gracias.
Mi profundo agradecimiento a Ricardo Martinelli por su confianza y haberme invitado a acompañarlo. Me tocó asumir el desafío de ser el candidato presidencial del partido Realizando Metas y Alianza, reto que asumí con humildad, lealtad, responsabilidad y un poco de esa locura que se necesita para volver a cambiar este país.
Permítanme un mensaje especial a mi familia, que fue, es y será mi mayor fortuna.
A Maricel, mi compañera de toda la vida, a José Raúl, Alexandra, Monique y Verónica mis hijos y el orgullo de este papá. Y claro mis nietos, que son la luz de mis ojos y mi mayor debilidad. A ustedes, muchas gracias desde lo más profundo de mi corazón. No los defraudaré, veo en ustedes a miles de mujeres, jóvenes y emprendedores que están depositando la confianza en mí. Su padre y su abuelo trabajará mucho por este país y dará, una vez más, lo mejor de sí.
Los panameños, hoy más que nunca, merecen unas elecciones justas y limpias. El próximo gobierno tendrá que enfrentar innumerables retos, por lo que requerirá del esfuerzo de todos. Tendremos que deponer nuestras diferencias y trabajar duro en la misma dirección. Creo en la necesaria unidad nacional, me esforzaré en lograrla. Solo espero que acudan a mi llamado y demos un ejemplo de altruismo político.
Les pido que salgan todos a votar este 5 de mayo y cuidemos los votos. Celebraremos juntos la victoria. ¡Qué Dios los bendiga y nos guie, en todos los retos que el maravilloso futuro nos depara!
Queridos panameños: ya el pueblo está decidido. Solo falta depositar su voluntad en las urnas el 5 de mayo y ganar la presidencia para cumplirles todas nuestras promesas desde el día uno.
Vamos a despertar de esta pesadilla. Vamos a despertar la economía y los empleos. Vamos a sacudir la pereza de los últimos dos gobiernos y levantar el país entre todos para terminar con el BLA BLA BLA y que llegue el CHEN CHEN al bolsillo de todos los panameños.
El 5 de mayo, MULINO PRESIDENTE CARAJO!!
Viva Panamá y los panameños.
Que Dios nos guíe, proteja e ilumine.
Muchas Gracias.






